Este miércoles llega a su fin el recorrido por algo de lo mejor de la obra de los directores neoyorquinos Woody Allen y Martin Scorsese, motivo de la edición del mes de julio de la propuesta cineclubística de Videoteca del Mirador en Cinéfilo Bar. En esta parada final vamos a echar mano de dos episodios de la película “Historias de Nueva York” (New York Stories), a saber, y en este orden, “Lecciones de Vida”, de Scorsese, y “Destrozando a Edipo”, de Allen, un drama y una comedia, respectivamente.
Los invitamos a que se acerquen a Cinéfilo para disfrutar de estos muy atractivos mediometrajes, cuya proyección tendrá lugar el miércoles 29 de julio, a partir de las 21, en Bv. San Juan 1020.-
«Lecciones de Vida”
(Life Lessons)
Director: Martin Scorsese
Año: 1989
Duración: 44 min.
Género: Drama
Fotografía: Néstor Almendros
Intérpretes: Nick Nolte (Lionel Dobie), Rosanna Arquette (Paulette) y Steve Buscemi (Gregory Stark).
Scorsese nos propone aquí, en este excelso relato cinematográfico, una rigurosa mirada del mundo artístico neoyorquino de por entonces (finales de los ’80), y de la relación maestro-alumna, valiéndose de las estupendas actuaciones de Nick Nolte y de Rosanna Arquette.
Lionel Dobie es un pintor veterano y de gran prestigio que, de buenas a primeras, se encuentra atrapado entre su pasión por el arte y una intensa obsesión por su sensual y joven asistente Paulette.
Como espectadores presenciamos la trampa que teje el pintor con la intención de envolver a su víctima, apelando a la fascinación que los artistas suelen provocar en las demás personas. Sin embargo, Dobie encontrará en su bella aprendiz la horma de su zapato.
La asistente de Dobie se ve forzada a convertirse en una suerte de polo a tierra que tiene que satisfacer todas las necesidades del pintor, solucionar sus inquietudes y estar inmóvil para ser observada y serle succionada su vida. Así, la obsesión del artista hacia su asistente expresa la necesidad de poseer un bonito objeto para la contemplación y un trofeo sexual que cimente su ego machista. Paulette lo entenderá así y dará batalla, más allá de su reconocimiento por el talento artístico de Dobie.
La genialidad del maestro excéntrico y descuidado, que con sus pinceladas crea arte sin mucho esfuerzo pero sí con mucho ímpetu, no le evitará a Dobie la frustración que deviene de la imposibilidad de atrapar a su presa y que se verá obligado a canalizar mediante la sublimación de la creación artística. La crisis emocional y los intentos de manipulación por parte de Dobie darán lugar a un escenario de permanente crispación en el vínculo entre el profesor y su alumna, tensión que Scorsese capta y logra transmitirnos con su habitual rigor narrativo y una gran fuerza visual.
“Destrozando a Edipo”
(Oedipus Wrecks)
DIRECTOR: Woody Allen
AÑO: 1989
DURACION: 42 min.
GENERO: Comedia
FOTOGRAFIA: Sven Nykvist
INTERPRETES: Woody Allen, Mia Farrow, Mae Queslec y Julie Kavner.
Comedia fantástica basada en el complejo de Edipo, aunque en esta ocasión, paradójicamente, cuando el hijo se deshace de la madre parece que comienza su liberación. Su angustia existencial residía precisamente en ella, una madre absorbente, sobreprotectora, despótica y que no ha podido asimilar nunca que su hijo se haya hecho mayor.
Un día la madre «desaparece», el hijo queda libre de tal suplicio y comienza a reanudar con algún éxito su vida sentimental. Pero entonces empieza un delirio en su vida totalmente increíble: Su madre, convertida en un ser gigantesco y fantasmagórico, aparece sobre el cielo de Nueva York, y lo llama al orden. Desde ese púlpito infinito, cuenta a todos los habitantes de la ciudad los pormenores sentimentales de su hijo.
La obligada ruptura con su pareja, relación que fuera objeto de la desaprobación materna, y el encuentro con una mujer de parecidas características a la anciana, harán desaparecer la pesadilla y regresar a la madre al mundo real, de tal modo que la “paz edípica” se reinstalará en la vida de este hombre.
En un nuevo tour de force, Allen escribe, dirige e interpreta de manera excelente esta divertidísima pieza, ayudado por Mia Farrow y la maravillosa Mae Questel, en este caso dando vida a una madre judía que se convierte en el eje de toda la historia, personaje que nos proporciona certeros y deliciosos gags. Allen interpreta a un hombre completamente manejado por su madre, que se convierte en su peor pesadilla cuando, tras acudir al show de un prestidigitador, ella aparece cual Dios en los cielos de Manhattan, para entero terror de su vástago. Las situaciones absurdas y el humor más personal del artista se dan cita en esta magnífica e hilarante realización, que nos cautiva de principio a fin.